Cómo gestionar las solicitudes de aumento salarial
Como empresario, puede que te hayas enfrentado en más de una ocasión a la solicitud de un aumento salarial por parte de algún empleado. Estos momentos pueden ser delicados, ya que implican un equilibrio entre el bienestar de tu equipo y la salud financiera de tu negocio.
En esta newsletter, quiero compartir contigo algunos consejos para manejar estas situaciones de forma estratégica, garantizando un equilibrio justo para ambas partes.
1. Incrementos salariales: un compromiso a largo plazo
Lo primero que debemos tener presente es qué supone un aumento salarial.
Aumentar el salario de un empleado implica un incremento en los costes fijos de la empresa. Estos son gastos que no pueden eliminarse fácilmente si la situación económica cambia. Por eso, antes de aceptar una solicitud de aumento, es crucial evaluar si el aumento se justifica por un incremento en la productividad del empleado, este puede deberse a que va a asumir nuevas responsabilidades o ha adoptado un rol distinto dentro de la empresa.
La idea clave que debemos transmitir al empleado es que un aumento salarial debe estar justificado por un incremento en su aportación de valor a la empresa. Esto significa que el aumento debe venir acompañado de nuevas responsabilidades, un desempeño superior, o la adquisición de competencias que generen un impacto positivo en los resultados del negocio. De esta forma, el crecimiento del empleado va de la mano con el crecimiento de la empresa.
💡TIP DE GESTIÓN: En este caso, disponer de descripciones del puesto que detallen las responsabilidades y resultados a conseguir por la persona que lo ocupe te ayudará a mantener estas conversaciones de forma más objetiva y clara para el empleado. Ayudándole a entender la relación entre franja salarial y la rentabilidad del puesto en el negocio.
2. Apuesta por incrementos variables ligados a objetivos
Si no está claro que un aumento fijo se vaya a rentabilizar, o no tenemos la posibilidad de ofrecer un nuevo puesto asociado a un mayor salario, entonces una solución eficiente es proponer incrementos variables asociados al cumplimiento de objetivos.
De este modo, el empleado tiene la posibilidad de mejorar su compensación, pero siempre ligado a un rendimiento concreto que aporte valor a la empresa. Esto nos permite proteger la rentabilidad del negocio y ofrecer un incentivo justo a quien se esfuerza por alcanzar sus metas.
3. Prevenir problemas mayores: mejor gestionar a tiempo y siendo transparentes
El objetivo de cualquier negociación salarial debe ser alcanzar un acuerdo que beneficie a ambas partes: el empleado se siente reconocido, y la empresa puede asumir el coste sin perder estabilidad financiera.
🚨Si ofrecemos un aumento de salario que no podemos sostener en el tiempo, podríamos enfrentarnos a una situación mucho más complicada en el futuro, como tener que prescindir de ese empleado al no poder mantener ese coste. Es preferible ser transparentes desde el inicio y negociar dentro de los márgenes que el negocio permita.
💡TIP DE GESTIÓN: Crea un protocolo interno para gestionar aumentos salariales. Una forma de evitar malentendidos y asegurar la transparencia es crear un protocolo interno de subida salarial. Este documento debe explicar claramente cómo se llevan a cabo las subidas de sueldo, a qué criterios se asocian (por ejemplo, adquisición de nuevas responsabilidades, desarrollo de competencias, cumplimiento de objetivos, etc.), y qué opciones están disponibles tanto para incrementos fijos como variables. Informar a todos los empleados de este protocolo ayuda a gestionar sus expectativas y a establecer un marco claro para las negociaciones.
4. No se trata de retener ni convencer a nadie a toda costa. Busca un win-win.
Ser honestos con el empleado sobre lo que la empresa puede ofrecer es clave para evitar problemas mayores.
Si el empleado no está de acuerdo con las condiciones que podemos plantear, es importante aceptar su decisión (no tomarlo como algo personal) o tomar la que consideremos más adecuada.
No se trata de convencer, sino de evaluar si la relación laboral sigue teniendo sentido para ambas partes.
La transparencia y la comunicación oportuna pueden ser nuestras mejores aliadas para evitar conflictos. Gestionar estas situaciones de manera directa y abierta nos ayuda a mantener un ambiente laboral positivo y a reducir costes innecesarios a largo plazo. Además, evita que una situación mal gestionada termine afectando el clima y la motivación del equipo.
💡TIP DE GESTIÓN: Disponer de un sistema de contratación eficiente te ayudará a mantener la serenidad y la confianza en la negociación aceptando que, si finalmente este empleado no continúa en el equipo, estás preparado para contratar a nuevo talento para tu empresa.
5. Resumen: Pasos para una buena gestión de una subida salarial
- Evaluar la solicitud
- Analiza la justificación del empleado: nuevas responsabilidades, competencias adquiridas, desempeño.
- Considera el impacto del aumento en los costes fijos de la empresa.
- Determinar el tipo de aumento
- Aumento fijo: si se justifica un valor añadido continuo.
- Aumento variable: ligado a objetivos o resultados específicos para mayor flexibilidad.
- Establecer un protocolo interno
- Define los criterios para subidas salariales y comunícalo al equipo.
- Alinea las expectativas de los empleados con la política de la empresa.
- Negociar de forma transparente
- Explica al empleado la viabilidad del aumento y sus implicaciones.
- Busca un acuerdo win-win que beneficie a ambas partes sin comprometer la rentabilidad.
- Tomar decisiones en caso de desacuerdo
- Acepta la decisión del empleado si no hay consenso.
- Evalúa si la relación laboral sigue siendo beneficiosa para ambas partes.
- Documenta el acuerdo
- Formalizar el aumento acordado y las condiciones asociadas para futuras referencias.
|
Deja tu comentario
Debe iniciar sesión para escribir un comentario.